Enamorado
viernes, 25 de marzo de 2011
miércoles, 17 de noviembre de 2010
Entonces qué?
Yó ya no escribía, muy seguro que ya no escribía. Yo no creía, yó no esperaba, yó había colgado todo, yó había dejado de escribir, no sé por qué. Por qué ahora creo de nuevo. El estado natural de una persona, de una persona es estar enamorado, escribo no sé por qué, enamorado, enamorado porque es estar ilusionado y estar ilusionado es ver la vida de otro color, siempre, de otro color.
lunes, 27 de septiembre de 2010
Te invito
Te invito a una tarde con el sol que cae sobre ti, a un sol que muere sobre nosotros, con la arena tan fria que el único calor son nuestro pechos, con la inmensidad naranja encima de los dos. Te invito a a esa oscuridad que cae cuando muere la tarde y nace eso que no sé describir todavia, con todo tan calmo que la respiración interrumpiría esas palabras de lujúria que dirías sin poner comas. Te invito a que me pongas a prueba de fuego con todas esas cosas que me harías, a que me muerdas la palabras de la boca, a que no me dejes terminar cada frase de afecto. Te invito a que me desconozcas en cada movimiento, a que me vuelvas loco con cada parpadeo, con cada rasguño en mi espalda que no dolerían hasta la mañana después de desperdirte dos semanas después, y sí, por qué no invitarte a quedarte dos semanas en mi cama, para que le pongas nombre a cada uno de mis lunares, a esos que tengo en el pecho, en los hombros y en la cara, que juguemos entre las sábanas desayunando cosquillas, risas y tostadas con café, por qué no. Te invito a esas mañanas de desvelo que te das una vez a las quinientas, de esas que sientes que siempre faltó algo y no sabes qué era antes de las tostadas. Te invito a que no quieras salir de mi cuarto, por esas cosquillas que son tan ricas, que te hacen reir aunque estés cansada de hacerlo, una y otra vez. Cansada. Te invito a que no quieras despedirte dos semanas después, a que te pese poner tres besos en mi mejilla, dos entre mis palabras y un pié fuera de mi. A que después de dos semanas quieras quedarte un mes, y de eso un par más hasta que pierdas la cuenta de cuantos años llevamos haciendo lo mismo y darnos cuenta que las cosquillas saben mejor en una cama más grande que la de aquella tarde con el sol que caia sobre ti y que un sol moria sobre los dos, con la arena tan fria que el único calor eran nuestros pechos.
Posteado por Carlos Alberto at 12:55 a.m. 3 personas comentaron la palabra
domingo, 19 de septiembre de 2010
En algún Bar de Lima
A veces escribo tonteras como esta, en algún bar de Lima, si, a veces escribo tonteras, con la chica que tengo al lado y nunca estuvo conmigo, como ahora conmigo, tan cerquita. Como ahora que la veo perdida ella y perdido yo en algún bar de Lima y con las tonteras que escribo hasta morderme solo por morder, maldita sea, si duele. Sin nada y con todo a mi costado y al final un beso, de esos que todavia no doy y no daré como ahora, como esta noche en algún bar de Lima. Olvido todo lo que dije, la chica con la que nunca estuve no es cualquiera, como cualquiera que conocí en algún bar de Lima escribiendo tonteras.
Posteado por Carlos Alberto at 9:04 p.m. 3 personas comentaron la palabra
martes, 3 de agosto de 2010
Por la noche
Seguro escribiría un blog entero de esta noche, pero las canciones, las cosas que salen de la boca de cada mujer falta de sobriedad sobre la hora, aqui en mi casa, ahora en esta noche, me llena de ebriedad en las letras, asi es, estoy contagiado de la espontaneidad, bella y siniestra de cada chica, de cada párrafo, de cada letra, que los souvenirs etiquetados en mis paredes, en mi baño, tal vez no cuenten con su lápiz labial, pero que el recuerdo fúnebre de cada sílaba mal puesta en la palabra sobreponen en mi cabeza un falso amor de plástico, llamado entre copas un verdadero amor, en otro idioma, que sólo Fernanda en su olvidadiza mente tal vez recuerde, ahora que no recuerda nada.
Posteado por Carlos Alberto at 10:58 a.m. 6 personas comentaron la palabra
lunes, 31 de mayo de 2010
Cuando camino
Entre un bosque de concreto, de esos que invento cuando camino, pensando, sin ruido, sin personas, con las manos en los bolsillos, con ilusiones en forma de gaviotas que no deberian andar por ahi volando, sin lugar, sin motivo aparente, pero si, si lo tienen, me dan vueltas en la cabeza, siguen mi dirección, y las pierdo, las pierdo entre el ruido que provoco cuando abro los ojos y estoy solo, no, camino con una sombra que no es la mia, una sombra que aparece cada vez que me acuesto en el rincón de mi cuarto en el mar, un mar sin peces, un mar sin ondas, un mar que sólo es azul en las noches cuando nadie lo ve, sólo yo, mis sueños y yo, inventando una mano para tomar, auxiliando los impulsos que heridos caen al suelo después de no conseguir una espalda para tocar, una boca para respirar.
Voy entre un bosque de arena, de esos que ya no quiero inventar, esperando gaviotas que morirán, gaviotas de papel que llevan escritas notas, notas con mi letra, para alguna mujer en el viento, para alguna mujer en el viento que sepa volar, que sepa volar conmigo.
Voy entre un bosque de arena, de esos que ya no quiero inventar, esperando gaviotas que morirán, gaviotas de papel que llevan escritas notas, notas con mi letra, para alguna mujer en el viento, para alguna mujer en el viento que sepa volar, que sepa volar conmigo.
martes, 1 de diciembre de 2009
De mis amores y otras mujeres II
Con D tuve una experiencia tan exquisita que me quedé con la miel en la boca cuando dejamos de vernos. Me prendió tanto enterarme del secreto que guardó durante todo el tiempo que salimos que al dia siguiente que terminó todo quise pegame un tiro en la cabeza. La conocí por una amiga en la Universidad, una noche en una fiesta de la facultad, yo tímido no hice más que decirle hola como estas y chau cuidate. Empecé mal, la veía casi todos los dias en la Universidad y sólo hablamos de juergas, ex enamorados, lo desgraciados que son algunos hombres y lo perras que son algunas mujeres, había una barrera que me impedia conocerla un poco más por dentro y no tan superficialmente, fuera de ese piercing en la lengua y en la nariz, con ese cabello ondulado iluminado, y esas manos blancas llenas de anillos. Hasta ahí no habia encontrado un tema en el que nos perdiéramos hablando, pero con las semanas fuí mejorando y la invité a tomar algo a un Bar en Barranco, aceptó con un 'ya, vamos' que salió de sus labios antes que terminara de preguntarle si queria ir a tomar algo, fué raro o tal vez me pareció. En fin, cuando llegué al lugar acordado era obvio que yo era el primero. Pasaron unos 10 minutos cuando D apareció, estaba vestida de manera tan sexy que tuve que verla dos veces para creer que era ella. Pueden imaginarme parado, con cara de pavo de lo sorprendido y sobre mi cabeza una nube que decia 'mierda' con un signo de exclamación al final. Fué demasiado. Una vez con los vasos en la mano empezamos a conversar, le pregunté de qué dependia que una mujer caiga en los brazos de un hombre -por asi decirlo- y de por qué algunos hombres caen en las manos de algunas mujeres, -por asi decirlo también- y dí en el clavo, conversamos hasta que cerró el Bar, en el taxi hasta su casa y al dia siguiente durante el break y esperó hasta que salga de clase para seguir con la conversación, yo me sentia identificado con lo que ella queria y viceversa, nos empapamos tanto con las experiencias de cada uno que terminamos contandonos más de cerca las cosas en la Biblioteca mientras ella me agarraba por el cuello y yo a ella por la cintura, llevando las palabras de la conversación al cuerpo de cada uno. Esa fué la conversación más sexual que he tenido hasta ahora. Se nos hizo costumbre hablar mientras nos besabamos siempre al final de las clases y yo seguía sintiendo que no llegaba a conocerla un poco más de lo que ya la conocía. Los dias pasaron, las semanas pasaron y poco a poco nos íbamos alejando más, como dos objetos flotantes dentro de un balde de agua agitada, hasta que cada uno se quedo en su respectivo borde. Un dia se me ocurrió llamarla para pregutarle como estaba, me dijo que queria hablar conmigo y que se sentia desequilibrada emocionalmente, -esas fueron sus palabras- no entendí bien hasta el dia siguiente que conversamos serios y sin besarnos. 'Soy bisexual y estoy saliendo con una chica' fué todo lo que entendí del monólogo que se mandó. Yo no sabia cómo reaccionar en ese momento, mucho menos que decirle a esa chica tan sexy que me empezaba a gustar sentimentalmente y que me atraía conocer más. Cuando volví en mi le dije que entendía por qué empezamos a vernos menos y que respetaba la dirección que queria darle a sus emociones, me despedí y me fuí. Llamé a la amiga que me la presento le conté todo, pensó que era un broma y a pesar que le dije que no, seguia sin creerme. Tuvo que convencerse -y yo también- cuando vimos a D de la mano con una chica, al dia siguiente que pasó todo. Las veia tan cariñosas que me dije; 'me dejó por una chica' solte una risa viendo a mi amiga y ella me dijo 'te dejó por una chica' y me puse a pensar en todo lo que pudo haber pasado con una sensación que me prendía y que supe apagar cuando de verdad me dí cuenta que me habia 'dejado' por una chica.
Cuando estaba a puertas de cumplir 20 años conocí a A, una chica de Intercambio en La Católica, la historia con ella es tan larga que podría decicarle un Blog entero y escribir sobre ella hasta que el mundo se acabe, asi que prefiero no hacerlo para no hacer tan largo el post -aunque la verdad es que no estoy tan preparado para hablar de ella-. Solo les digo que fué la persona de la que puedo decir que me enamoré, que duramos más de 3 años, que fuimos testigos cuando mi hermano se casó, que era como parte de mi familia y que llegamos a vivir juntos. Una mujer con los sentimientos más nobles, organizada y responsable con un montón de etcéteras más, de las que le puedes presentar a tu mamá y tu papá puede sentarse a conversar con ella sobre la política en los Estados Unidos. Esa fué A, a quien todavia le guardo mucho cariño.
El vacio del asiento de al lado que N dejó lo ocupó una extraña el primer dia de clases, no la habia visto el ciclo anterior, era una de esas chicas que la ves y te quedas viendola hasta que ya no puedes verla más porque la vista no te alcanza. Renzo, el más saca-plan de mis amigos de la Universidad fué el que empezó a conocerla, yo conversaba con ella muy de vez en cuando, solo cuando estábamos en grupo hablando cualquier tontería o cada vez que Renzo hacia mención de mi casa en Cerro Azul. Ella era AL, amante de la playa, los Mushrooms Swiss y el Champagne, que para ella era como agua. Con el tiempo se hizo muy buena amiga de Renzo y como Renzo y yo íbamos a todas partes juntos se hizo buena amiga mia también. A nosotros tres se acopló Diana amiga mia y de Renzo desde ciclos pasados. Los cuatro compartimos juergas, clases de Bar y talleres de danza, aparte de todo el tiempo que conversabamos perdiéndonos en nuestras horas libres en la Universidad y también fuera. Fué un buen ciclo en todo sentidos. En Julio de ese año AL dejó la Universidad para irse a estudiar a Belgica y recuperar todos los años que no estuvo con su mamá, padres divorciados, un poco complicado. Luego de una breve despedida a las 5 de la mañana saliendo de un lugar concurrido en Miraflores no volví a ver ni saber nada de AL... hasta hace unos meses atrás. Una chica de cuyo nombre no podría olvidar me agregó a Facebook con un mensaje que decía 'estoy en Lima, tenemos que vernos'. Le escribí contandole lo sorprendido que estaba y lo felíz que me ponía pensar que iba a verla después de tantos años. Ibamos a estar otra vez juntos los cuatro, Renzo me llamó el mismo dia que recibí el mensaje de AL para decirme que se habia enterado por Facebook que éramos amigos, que a él también le mando un mensaje, que tenia planeado ir al mismo lugar donde la despedimos para reencontrarnos y que ya estaba de novio con Diana, que sorpresa. Ya en el lugar de reecuentro la última en llegar fué AL, que mientras Diana me explicaba como terminó junto a Renzo apareció. Con el cabello un poco más largo, más claro y más lacio abrazó a cada uno de nosotros, estaba preciosa. Tuvimos el tiempo y la cabeza necesaria para ponernos al dia en nuestras vidas y contarnos lo que habíamos hecho esos últimos años sin vernos todos. Empecé a salir de vez en cuando con ella, a veces iba a su departamento otras veces simplemente caminabamos y conversábamos, tuvimos mucha conversación por Facebook y empezó a contarme con más detalle su vida en Bélgica. Una noche me invitó a tomar un Jagermeister, le quedaban dos de las cinco botellas que habia traido, me resulto muy agradable el licor, preparamos algunos cócteles y nos sentamos en la alfombra a tomar y conversar más. Mientras me contaba que vivió en una Región de Bélgica donde hablaban francés y que le choco mucho al principio y que los hombres allá son más machistas que acá yo empecé a sentir los efecto del alcohol y dentro de eso ví que ella también empezaba a tenerlos. Lo que pasó después fué tan raro, tan hormonal y tan 'no puedo creer lo que estamos haciendo' que desconocí a AL y me desconocí también, nos dejamos llevar. Para resumir un poco, nos encontramos en media madrugada en su cuarto, cansados del desvelo, me dolia todo el cuerpo y al poco tiempo ella se quedó dormida, yo le seguí. Desperté con una sensación a gloria, con un poco de culpa y no estaba seguro de qué era lo que iba a pasar cuando me levantara de la cama. AL no estaba a mi lado. Olía a café y tostadas, fuí hasta la cocina, me dijo buenos dias, le dije hola y empezamos con el desayuno. Me era dificil comer las tostadas sin mirar por debajo del cuello a AL, ese trapito transparente que usa para dormir fué terrible lo que duró el desayuno. Ella no parecia darle mucha importancia, no al hecho de la noche entera, sino en lo que pudiera repercutir. Intenté tocar el tema pero ella me asaltó primero con las cosas que queria hacer durante el dia, me sorprendió e hice un nuevo intento para tocar el tema, lo conseguí y no hizo nada más que verme incrédula hasta que terminé de exponer mi punto de vista. 'No estuvo del todo bien que me haya quedado', asi concluí, a lo que ella acelerada y sorprendida respondió 'yo no lo creo así', le dije que debía irme, que gracias por el espacio, la compañía y el desayuno, ella armó una escena adornada con algunas lágrimas diciendome que necesitaba de alguien con quien pasar el tiempo y conversar, me explicó lo que había significado pasar la noche ahí, yo no entendia absolutamente nada y me empezó a asustar la forma en que me hablaba, era una border total. Lo que hicimos estuvo mal de una forma, es lo que pienso, para ella estuvo bien pero de otra manera. Estuvimos juntos un rato más hasta que se calmó y me fuí pensando en por qué no despertamos, desayunamos tranquilos, conversamos sobre lo que pasó y empezar a olvidarlo. Algo triste por cómo se habian dado las cosas y molesto por no saber manejar la situación cuando empezaba a empeorar. Es verdad que éramos buenos amigos pero el vínculo no era tan profundo. En fin, no la he vuelto a ver hasta ahora, no creo que lo haga tampoco, no quiero hacerlo. Nos mensajéabamos por Facebook raramente, para saber como estábamos; en uno de esos mensajes me dijo que regresaba a Bélgica este diciembre y que no sabía cuando regresaba. Lo último que le dije fué 'suerte en todo' y me despedí, de eso hace tres meses.
Y bien, llegué a mis 23 años y la verdad es que no sé cual es la situación actual con esta chica. T es una de las tantas que conocí en la adolescencia, solo que linda y juerguera. Sobrina de la ex de mi hermano menor y prima de cariño de mi actual cuñada, ¿tal vez un poco dificil de entender no? bueno, fué mi misma cuñada la que me la presento hace muchos años, un sábado de fiesta en la noche y sí, me gustó. Nunca nos vimos seguido ni tuvimos largas conversaciones, por varios años sólo sabíamos la info básica de cada uno; nuestra edad, dónde vivíamos, que hacíamos, cosas así, sin más que eso, sólo éramos conocidos con muchos amigos en común. Nos veíamos en las fiestas de mi colegio o en alguna reunión por ahí con nuestros amigos, estudiamos en diferentes coles y ella tenía más amigos en el mio que en el suyo. En una de esas fiestas, en Diciembre del año pasado la volví a encontrar, en ese tiempo yo seguía con A. Yo había ido con unos amigos y mi hermano, me encontré con más amigos y amigas ahí, todos juergueando la pasabamos bien mientras la noche corría, cuando de repente llega otro amigo con T, la dejó en nuestro grupo y se fué; no estaba sobria, ni estaba ebria, fué directo donde estaba mi hermano, empezó a hablarle al oido y mi hermano me miraba, a los segundos ella se acercó a mi y me preguntó por A -para esto A y T se conocieron en el Matrimonio de mi hermano hace un par de años- le dije que estaba bien que no habia podido venir con nosotros a la fiesta, me quedé intrigado por la pregunta y empezamos a conversar, todo mientras yo estaba sentado sobre la barra con las piernas abiertas y ella entre mis rodillas, demasiado cerca al punto crítico. Ella se fué a bailar y me quedé con mis amigos, la noche siguió corriendo, pasó un buen rato y regresó donde estaba yo, volvió a preguntarme por A, le respondí con lo mismo y con una sonrisa le dije que ya no tomara más, que ya me había preguntado eso, sonrió y me dijo, verdad, sorry y soltó una risita, de esas que sueltas cuando dijiste una estupidéz cuando estas con copas encima y quieres barajarla. Después se fué y no la volví a ver en toda la madrugada. Se acercaba año nuevo y de cajón tenía que pasarla en Cerro Azul, me reuní con mis amigos y partimos al sur dias antes. Mi hermano ya estaba allá y me soltó el dato que T también se habia apuntado y llegaba antes de las 12 el mismo 31. Ok, una tarde que fuimos a la ciudad a arreglar las lunas electricas de la camioneta que tenia y a comprar algunas cosas para abastecer nuestra noche de fin de 2008 mi hermano en tono de secreto me sacó la duda de qué era lo que T le habia dicho al oido la noche de la fiesta; 'tu hermano no me hace caso', fué lo que le dijo. Me movió el cerebro por unos segundos, me reí y le dije a mi hermano 'ni cagando', y él volvió a afirmarlo. Estaba seguro que no iba a pasar absolutamente nada con T, A era mi enamorada y el doble juego nunca me gustó. Asi que sin darle mucha importancia nos olvidamos del tema, T llegó, todo salió exelente y todos tuvimos EL año nuevo. A no pudo estar con nosotros porque su papá llegaba del extranjero el mismo 31 y la iba a pasar con él. Dos meses después ya habia terminado mi relación con ella y a las pocas semanas con los ánimos mucho más altos empecé a tomar más contacto con T, obviamente sin decirle lo que mi hermano me habia dicho. Los dos solteros empezamos a contarnos algunas cosas sobre nuestras relaciones pasadas y cómo nos habia cambiado, sin duda una excusa para hablar y comenzar a conocer un poco más otro lado de nosotros. Empezamos yendo al cine, salíamos a comer, nos reuníamos en la casa de amigos y muy raramente salíamos a tomar algo. Entre el Gym, sus clases y su trabajo nuestras salidas eran muy escasas, nos veíamos contadas veces. A pesar de eso nos dimos la oportunidad de conocer detalles de nuestras vidas y hasta un punto fué interesante. Era yo quien iniciaba con las invitaciones e incentivaba el vernos algo más seguido, hacer algo, lo que sea con tal de pasar una pequeñísima parte del dia juntos. Por todo lo que conversábamos, me dí cuenta que habia un interes, no en el sentido de interesada por parte de ella, más bien un interes por intentar empezar algo, cosa que al parecer se enfrió a pesar que me dijo que faltaba 'soltarnos' cuando nos veiamos y que se preguntaba que sería de nosotros si fuéramos más que el famoso 'más que amigos'. Con todo eso yo ya le habia dicho que intentaramos algo, ella muy femenina y toda una Lady no me dijo si ni tampoco no, era un stand by terrible y resultó que una vez más con las mujeres no entendí nada. Seguíamos conversando y el tema seguía saliendo, ella nunca aceptó o se nego a aceptar empezar algo y seguía preguntándome que sería de nosotros si... entonces me cansé, me aburrí y decidí cortar la comunicación, a tratarla con indiferencia, restarle importancia y al parecer resultó. Era ella la que me invitaba a salir, cada vez que llegaba en la madrugada del trabajo o de alguna fiesta, me conectaba al Msn y era la primera en escribirme. Seguí firme con mi actitud, no queria ablandarme y tentar perderme de nuevo en su incertidumbre y otra vez caer en stand by, de ninguna manera. Como dije, la llegué a conocer más y es la verdad, es muy indecisa, depende de otros para tomar decisiones y muchas veces toma la que más le conviene, no puede ni siquiera escoger una mesa en un restaurant para sentarse, entre muchas otras cosas parecidas. Y qué les puedo decir, suficiente como para sumarle desinterés al romanticismo que tuve cuando empezamos a salir. Ahora parece que estamos de igual a igual, no hablamos mucho, nunca me avisa cuando son sus dias libres, siempre me entero tarde... bueno, en realidad nunca supo avisarme cuando eran. Y ya, algunas veces me acuerdo cuando yo le decía que la quería abrazar y ella decía que por qué no lo hacía y nunca lo hice. En fin, resultó ser demasiado complicada y yo tal véz también un poco pero la paciencia para entenderla no me dió más y no queria terminar complicandome la vida. Hace mucho que no nos vemos pero seguimos en contacto. Ví muy cuadrada la idea de que pasemos de lo que somos a algo mas serio, no hay tiempo para nada. A pesar de todo, debo confesar que le tengo ganas, pero mal, terribles y eso no va a cambiar en un buen tiempo.
¿Quién será la próxima? ¿Será una de las dulces? ¿una de las picantes? ¿una de esas de verano? ¿una que pueda presentarle a mi mamá? ¿una que no? ¿a una que no le importe lo que escribí? ¿una como yo? Hay tantas mujeres, tantos tipos de ellas que sólo quiero que me toque una que me inspire hacer todas las cosas que no hice para mantener una relación y que esté seguro que no me permita cometer los mismos errores. Una como para que sea mi primera y tal véz mi última.
Cuando estaba a puertas de cumplir 20 años conocí a A, una chica de Intercambio en La Católica, la historia con ella es tan larga que podría decicarle un Blog entero y escribir sobre ella hasta que el mundo se acabe, asi que prefiero no hacerlo para no hacer tan largo el post -aunque la verdad es que no estoy tan preparado para hablar de ella-. Solo les digo que fué la persona de la que puedo decir que me enamoré, que duramos más de 3 años, que fuimos testigos cuando mi hermano se casó, que era como parte de mi familia y que llegamos a vivir juntos. Una mujer con los sentimientos más nobles, organizada y responsable con un montón de etcéteras más, de las que le puedes presentar a tu mamá y tu papá puede sentarse a conversar con ella sobre la política en los Estados Unidos. Esa fué A, a quien todavia le guardo mucho cariño.
El vacio del asiento de al lado que N dejó lo ocupó una extraña el primer dia de clases, no la habia visto el ciclo anterior, era una de esas chicas que la ves y te quedas viendola hasta que ya no puedes verla más porque la vista no te alcanza. Renzo, el más saca-plan de mis amigos de la Universidad fué el que empezó a conocerla, yo conversaba con ella muy de vez en cuando, solo cuando estábamos en grupo hablando cualquier tontería o cada vez que Renzo hacia mención de mi casa en Cerro Azul. Ella era AL, amante de la playa, los Mushrooms Swiss y el Champagne, que para ella era como agua. Con el tiempo se hizo muy buena amiga de Renzo y como Renzo y yo íbamos a todas partes juntos se hizo buena amiga mia también. A nosotros tres se acopló Diana amiga mia y de Renzo desde ciclos pasados. Los cuatro compartimos juergas, clases de Bar y talleres de danza, aparte de todo el tiempo que conversabamos perdiéndonos en nuestras horas libres en la Universidad y también fuera. Fué un buen ciclo en todo sentidos. En Julio de ese año AL dejó la Universidad para irse a estudiar a Belgica y recuperar todos los años que no estuvo con su mamá, padres divorciados, un poco complicado. Luego de una breve despedida a las 5 de la mañana saliendo de un lugar concurrido en Miraflores no volví a ver ni saber nada de AL... hasta hace unos meses atrás. Una chica de cuyo nombre no podría olvidar me agregó a Facebook con un mensaje que decía 'estoy en Lima, tenemos que vernos'. Le escribí contandole lo sorprendido que estaba y lo felíz que me ponía pensar que iba a verla después de tantos años. Ibamos a estar otra vez juntos los cuatro, Renzo me llamó el mismo dia que recibí el mensaje de AL para decirme que se habia enterado por Facebook que éramos amigos, que a él también le mando un mensaje, que tenia planeado ir al mismo lugar donde la despedimos para reencontrarnos y que ya estaba de novio con Diana, que sorpresa. Ya en el lugar de reecuentro la última en llegar fué AL, que mientras Diana me explicaba como terminó junto a Renzo apareció. Con el cabello un poco más largo, más claro y más lacio abrazó a cada uno de nosotros, estaba preciosa. Tuvimos el tiempo y la cabeza necesaria para ponernos al dia en nuestras vidas y contarnos lo que habíamos hecho esos últimos años sin vernos todos. Empecé a salir de vez en cuando con ella, a veces iba a su departamento otras veces simplemente caminabamos y conversábamos, tuvimos mucha conversación por Facebook y empezó a contarme con más detalle su vida en Bélgica. Una noche me invitó a tomar un Jagermeister, le quedaban dos de las cinco botellas que habia traido, me resulto muy agradable el licor, preparamos algunos cócteles y nos sentamos en la alfombra a tomar y conversar más. Mientras me contaba que vivió en una Región de Bélgica donde hablaban francés y que le choco mucho al principio y que los hombres allá son más machistas que acá yo empecé a sentir los efecto del alcohol y dentro de eso ví que ella también empezaba a tenerlos. Lo que pasó después fué tan raro, tan hormonal y tan 'no puedo creer lo que estamos haciendo' que desconocí a AL y me desconocí también, nos dejamos llevar. Para resumir un poco, nos encontramos en media madrugada en su cuarto, cansados del desvelo, me dolia todo el cuerpo y al poco tiempo ella se quedó dormida, yo le seguí. Desperté con una sensación a gloria, con un poco de culpa y no estaba seguro de qué era lo que iba a pasar cuando me levantara de la cama. AL no estaba a mi lado. Olía a café y tostadas, fuí hasta la cocina, me dijo buenos dias, le dije hola y empezamos con el desayuno. Me era dificil comer las tostadas sin mirar por debajo del cuello a AL, ese trapito transparente que usa para dormir fué terrible lo que duró el desayuno. Ella no parecia darle mucha importancia, no al hecho de la noche entera, sino en lo que pudiera repercutir. Intenté tocar el tema pero ella me asaltó primero con las cosas que queria hacer durante el dia, me sorprendió e hice un nuevo intento para tocar el tema, lo conseguí y no hizo nada más que verme incrédula hasta que terminé de exponer mi punto de vista. 'No estuvo del todo bien que me haya quedado', asi concluí, a lo que ella acelerada y sorprendida respondió 'yo no lo creo así', le dije que debía irme, que gracias por el espacio, la compañía y el desayuno, ella armó una escena adornada con algunas lágrimas diciendome que necesitaba de alguien con quien pasar el tiempo y conversar, me explicó lo que había significado pasar la noche ahí, yo no entendia absolutamente nada y me empezó a asustar la forma en que me hablaba, era una border total. Lo que hicimos estuvo mal de una forma, es lo que pienso, para ella estuvo bien pero de otra manera. Estuvimos juntos un rato más hasta que se calmó y me fuí pensando en por qué no despertamos, desayunamos tranquilos, conversamos sobre lo que pasó y empezar a olvidarlo. Algo triste por cómo se habian dado las cosas y molesto por no saber manejar la situación cuando empezaba a empeorar. Es verdad que éramos buenos amigos pero el vínculo no era tan profundo. En fin, no la he vuelto a ver hasta ahora, no creo que lo haga tampoco, no quiero hacerlo. Nos mensajéabamos por Facebook raramente, para saber como estábamos; en uno de esos mensajes me dijo que regresaba a Bélgica este diciembre y que no sabía cuando regresaba. Lo último que le dije fué 'suerte en todo' y me despedí, de eso hace tres meses.
Y bien, llegué a mis 23 años y la verdad es que no sé cual es la situación actual con esta chica. T es una de las tantas que conocí en la adolescencia, solo que linda y juerguera. Sobrina de la ex de mi hermano menor y prima de cariño de mi actual cuñada, ¿tal vez un poco dificil de entender no? bueno, fué mi misma cuñada la que me la presento hace muchos años, un sábado de fiesta en la noche y sí, me gustó. Nunca nos vimos seguido ni tuvimos largas conversaciones, por varios años sólo sabíamos la info básica de cada uno; nuestra edad, dónde vivíamos, que hacíamos, cosas así, sin más que eso, sólo éramos conocidos con muchos amigos en común. Nos veíamos en las fiestas de mi colegio o en alguna reunión por ahí con nuestros amigos, estudiamos en diferentes coles y ella tenía más amigos en el mio que en el suyo. En una de esas fiestas, en Diciembre del año pasado la volví a encontrar, en ese tiempo yo seguía con A. Yo había ido con unos amigos y mi hermano, me encontré con más amigos y amigas ahí, todos juergueando la pasabamos bien mientras la noche corría, cuando de repente llega otro amigo con T, la dejó en nuestro grupo y se fué; no estaba sobria, ni estaba ebria, fué directo donde estaba mi hermano, empezó a hablarle al oido y mi hermano me miraba, a los segundos ella se acercó a mi y me preguntó por A -para esto A y T se conocieron en el Matrimonio de mi hermano hace un par de años- le dije que estaba bien que no habia podido venir con nosotros a la fiesta, me quedé intrigado por la pregunta y empezamos a conversar, todo mientras yo estaba sentado sobre la barra con las piernas abiertas y ella entre mis rodillas, demasiado cerca al punto crítico. Ella se fué a bailar y me quedé con mis amigos, la noche siguió corriendo, pasó un buen rato y regresó donde estaba yo, volvió a preguntarme por A, le respondí con lo mismo y con una sonrisa le dije que ya no tomara más, que ya me había preguntado eso, sonrió y me dijo, verdad, sorry y soltó una risita, de esas que sueltas cuando dijiste una estupidéz cuando estas con copas encima y quieres barajarla. Después se fué y no la volví a ver en toda la madrugada. Se acercaba año nuevo y de cajón tenía que pasarla en Cerro Azul, me reuní con mis amigos y partimos al sur dias antes. Mi hermano ya estaba allá y me soltó el dato que T también se habia apuntado y llegaba antes de las 12 el mismo 31. Ok, una tarde que fuimos a la ciudad a arreglar las lunas electricas de la camioneta que tenia y a comprar algunas cosas para abastecer nuestra noche de fin de 2008 mi hermano en tono de secreto me sacó la duda de qué era lo que T le habia dicho al oido la noche de la fiesta; 'tu hermano no me hace caso', fué lo que le dijo. Me movió el cerebro por unos segundos, me reí y le dije a mi hermano 'ni cagando', y él volvió a afirmarlo. Estaba seguro que no iba a pasar absolutamente nada con T, A era mi enamorada y el doble juego nunca me gustó. Asi que sin darle mucha importancia nos olvidamos del tema, T llegó, todo salió exelente y todos tuvimos EL año nuevo. A no pudo estar con nosotros porque su papá llegaba del extranjero el mismo 31 y la iba a pasar con él. Dos meses después ya habia terminado mi relación con ella y a las pocas semanas con los ánimos mucho más altos empecé a tomar más contacto con T, obviamente sin decirle lo que mi hermano me habia dicho. Los dos solteros empezamos a contarnos algunas cosas sobre nuestras relaciones pasadas y cómo nos habia cambiado, sin duda una excusa para hablar y comenzar a conocer un poco más otro lado de nosotros. Empezamos yendo al cine, salíamos a comer, nos reuníamos en la casa de amigos y muy raramente salíamos a tomar algo. Entre el Gym, sus clases y su trabajo nuestras salidas eran muy escasas, nos veíamos contadas veces. A pesar de eso nos dimos la oportunidad de conocer detalles de nuestras vidas y hasta un punto fué interesante. Era yo quien iniciaba con las invitaciones e incentivaba el vernos algo más seguido, hacer algo, lo que sea con tal de pasar una pequeñísima parte del dia juntos. Por todo lo que conversábamos, me dí cuenta que habia un interes, no en el sentido de interesada por parte de ella, más bien un interes por intentar empezar algo, cosa que al parecer se enfrió a pesar que me dijo que faltaba 'soltarnos' cuando nos veiamos y que se preguntaba que sería de nosotros si fuéramos más que el famoso 'más que amigos'. Con todo eso yo ya le habia dicho que intentaramos algo, ella muy femenina y toda una Lady no me dijo si ni tampoco no, era un stand by terrible y resultó que una vez más con las mujeres no entendí nada. Seguíamos conversando y el tema seguía saliendo, ella nunca aceptó o se nego a aceptar empezar algo y seguía preguntándome que sería de nosotros si... entonces me cansé, me aburrí y decidí cortar la comunicación, a tratarla con indiferencia, restarle importancia y al parecer resultó. Era ella la que me invitaba a salir, cada vez que llegaba en la madrugada del trabajo o de alguna fiesta, me conectaba al Msn y era la primera en escribirme. Seguí firme con mi actitud, no queria ablandarme y tentar perderme de nuevo en su incertidumbre y otra vez caer en stand by, de ninguna manera. Como dije, la llegué a conocer más y es la verdad, es muy indecisa, depende de otros para tomar decisiones y muchas veces toma la que más le conviene, no puede ni siquiera escoger una mesa en un restaurant para sentarse, entre muchas otras cosas parecidas. Y qué les puedo decir, suficiente como para sumarle desinterés al romanticismo que tuve cuando empezamos a salir. Ahora parece que estamos de igual a igual, no hablamos mucho, nunca me avisa cuando son sus dias libres, siempre me entero tarde... bueno, en realidad nunca supo avisarme cuando eran. Y ya, algunas veces me acuerdo cuando yo le decía que la quería abrazar y ella decía que por qué no lo hacía y nunca lo hice. En fin, resultó ser demasiado complicada y yo tal véz también un poco pero la paciencia para entenderla no me dió más y no queria terminar complicandome la vida. Hace mucho que no nos vemos pero seguimos en contacto. Ví muy cuadrada la idea de que pasemos de lo que somos a algo mas serio, no hay tiempo para nada. A pesar de todo, debo confesar que le tengo ganas, pero mal, terribles y eso no va a cambiar en un buen tiempo.
¿Quién será la próxima? ¿Será una de las dulces? ¿una de las picantes? ¿una de esas de verano? ¿una que pueda presentarle a mi mamá? ¿una que no? ¿a una que no le importe lo que escribí? ¿una como yo? Hay tantas mujeres, tantos tipos de ellas que sólo quiero que me toque una que me inspire hacer todas las cosas que no hice para mantener una relación y que esté seguro que no me permita cometer los mismos errores. Una como para que sea mi primera y tal véz mi última.
Posteado por Carlos Alberto at 11:37 a.m. 4 personas comentaron la palabra
Etiquetas: 23 años, admitir cosas, chicas, Diversión, Ex, memorias, Mujeres
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